Asesinan en ataque yihadista a un estudiante de la universidad de Kabul

Al menos 22 personas resultaron muertas en el ataque, perpetrado el lunes 2-N por el grupo Estado Islámico

Los yihadistas que atacaron la universidad de Kabul esta semana mataron fríamente, «uno por uno», los estudiantes que intentaban huir saltando por las ventanas de las aulas, contó este miércoles 4-N un superviviente a la AFP.

Al menos 22 personas, en su mayoría estudiantes, resultaron muertas y unas 27 heridas en este ataque, perpetrado el lunes 2 de noviembre por tres hombres armados, y reivindicado por el grupo Estado Islámico.

Mohamad Qasim Kohistani, de 22 años, estudiante de Política Pública en la universidad de Kabul, describió en detalle el ataque, que duró siete horas.

«Esperábamos que nuestro profesor llegara, cuando, de repente, oímos ruidos fuertes que venían del primer piso», indica el joven, que se encontraba en el segundo piso. «Sabíamos que algo iba mal, empezamos a saltar por la ventana», añade.

Se refugió bajo el alféizar de la ventana con sus amigos, asistiendo a una escena sangrienta mientras los asaltantes iban de sala en sala buscando víctimas. 

«Después de tomar el control de nuestra clase, un hombre armado comenzó a disparar a los estudiantes que huían por la ventana», dice. «Los (otros dos) hombres armados disparaban a quemarropa contra los estudiantes uno por uno», continúa el joven. 

Cientos de estudiantes lograron huir, algunos saltando sobre las murallas para llegar a la calle, mientras que otros se atrincheraron en salas donde fueron rescatados por las fuerzas especiales afganas.

«Estábamos impotentes»

Mohamad Kohistani perdió a su mejor amigo, Ahmad Ali, que intentaba ayudar a otra amiga, Roqia. 

«No saltó por la ventana porque Roqia se había desmayado», explica. «Quería ayudarla, pero el tirador los apuntó a ambos en la cabeza y los mató».

Kohistani, que se torció el pie al saltar, permaneció oculto durante varias horas en el campus. «Fue el momento más horrible de mi vida», admite. «Se escuchaban gritos, pedidos de ayuda, pero estábamos impotentes».

Después del ataque, el joven se enteró que los atacantes habían matado a todos los estudiantes que se encontraban en un aula situada debajo de la suya.

«Todavía estoy en estado de shock. Ayer ni siquiera podía hablar», suspira. 

Los funcionarios afganos afirmaron que dos de los atacantes murieron a tiros por las fuerzas de seguridad, mientras que el tercero se hizo explotar durante el ataque.

«Dejen de matarnos»

El Estado Islámico reivindicó el ataque, el segundo en menos de dos semanas contra un centro educativo en la capital afgana. 

Pero el vicepresidente Amrulá Saleh acusa a los talibanes y a sus aliados en Pakistán, a pesar de que este grupo niega cualquier conexión con el ataque. 

Afganistán observó un día de luto nacional el martes 3-N, mientras los estudiantes protestaban frente a la universidad de Kabul, portando pancartas que decían: «Dejen de matarnos».

Afganistán está experimentando un aumento de la violencia pese a que los talibanes y el gobierno de Kabul iniciaron en septiembre conversaciones en Doha para poner fin a décadas de guerra, sin grandes avances hasta ahora.

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