Boric advierte sobre «auge de regímenes autoritarios» hace critica al gobierno de Maduro
El presidente de Chile, Gabriel Boric, alertó este miércoles sobre los «desvíos autoritarios» en el mundo actual, subrayando la importancia de defender la democracia sin doble estándares, durante su intervención en la conmemoración en Roma del 50 aniversario del atentado contra Bernardo Leighton, exlíder democristiano chileno.
En un acto celebrado en el Templo de Adriano de Roma, Boric destacó la necesidad de mantener vigilante la democracia frente a cualquier forma de autoritarismo, haciendo énfasis en la importancia de una defensa coherente de los derechos humanos y la libertad.
«Es importante decir desde la izquierda que no podemos perder de vista que los desvíos autoritarios pueden estar a la orden del día en cualquier lado», manifestó el mandatario, haciendo un llamado a la unidad en la lucha contra regímenes que violan los principios democráticos.
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El evento conmemoró el atentado de 1975 en Roma contra Bernardo Leighton y su esposa Ana Fresno, orquestado por la dictadura de Augusto Pinochet.
En su discurso, Boric recordó a figuras como Leighton, que, según él, «representan lo mejor de los valores humanistas» y fueron fundamentales para la construcción de Chile.
A la ceremonia asistieron personalidades como el presidente de Italia, Sergio Mattarella, y otros políticos y diplomáticos internacionales.
El presidente chileno también hizo referencia al contexto geopolítico del atentado, destacando que no solo fue producto de la dictadura chilena, sino también de una cooperación entre regímenes autoritarios, citando la dictadura en España y miembros de la ultraderecha italiana como actores involucrados en el ataque.
Boric aprovechó la ocasión para advertir sobre lo que considera una «internacional de la derecha» que promueve la intolerancia y el odio en varias partes del mundo.
«Ante la intolerancia y el odio, las fuerzas progresistas debemos responder no solo señalando a la amenaza, sino ofreciendo una alternativa de progreso, humanidad, amor y honestidad», sostuvo, citando como ejemplo el legado político de Bernardo Leighton.
El mandatario también aprovechó su intervención para recordar lecciones cruciales de la historia, como la necesidad de mantener la vigilancia ante las amenazas de autoritarismo.
Boric advirtió que las dictaduras y los líderes autoritarios «cruzan fronteras para imponer el miedo», y citó como ejemplo la crisis política en Venezuela, añadiendo que «los regímenes autoritarios se extienden más allá de sus fronteras cuando creen que pueden hacerlo impunemente».
En este contexto, Boric hizo alusión al caso reciente del asesinato del exmilitar venezolano Ronald Ojeda en Santiago de Chile, en el que uno de los principales sospechosos estaría vinculado al gobierno de Nicolás Maduro.
«En Chile tenemos el caso del asesinato de un exmilitar venezolano, en donde uno de los sospechosos es el mismo régimen del dictador Nicolás Maduro», indicó, refiriéndose a las acusaciones que apuntan a la implicación del gobierno venezolano en el homicidio de Ojeda.
La intervención de Boric refuerza su postura crítica hacia los regímenes autoritarios y su llamado a fortalecer la democracia, tanto a nivel nacional como internacional, en un contexto de creciente polarización política y desafíos a los derechos humanos en diversas partes del mundo.
Versión Final
