Descubre lo qué le sucede a tu cuerpo cuando bebes té de cúrcuma a diario

Este delicioso té se elabora mediante la infusión de la cúrcuma, una especia de color amarillo brillante derivada de la raíz de Curcúma longa.

A muchas personas les gusta preparar té de cúrcuma porque es una forma sencilla de incorporar curcumina, su principal compuesto bioactivo, en la dieta.

La curcumina ha sido estudiada por sus beneficios antiinflamatorios, antioxidantes e inmunizantes, entre otros.

Aunque todavía se están realizando investigaciones científicas en profundidad sobre los efectos de la cúrcuma para la salud, algunos estudios sugieren que ambos compuestos ofrecen varios beneficios potenciales para la salud.

Además, consumirlo a diario supone determinados aspectos sobre el cuerpo humano.

La cantidad de esta bebida que se puede ingerir diariamente depende de factores individuales como la tolerabilidad y las preferencias personales.

Para la mayoría de las personas, una ingesta moderada de una o dos tazas al día puede ofrecer los beneficios de la cúrcuma sin un alto riesgo de efectos secundarios.

Un gran consumo de este té se considera antiinflamatorio debido a las propiedades de la curcumina, que reduce la inflamación del cuerpo.

También es rico en antioxidantes por lo que ayuda a neutralizar los radicales libres, que son moléculas inestables que dañan las células y contribuyen al envejecimiento y a la aparición de enfermedades.

Además, los beneficios antiinflamatorios de la cúrcuma pueden ayudar a las personas con afecciones digestivas como la enfermedad inflamatoria intestinal.

Beber una taza de té de cúrcuma al día favorece el funcionamiento normal del sistema inmunitario ya que según algunos estudios se cree que es capaz de mejorar la capacidad del organismo para combatir infecciones.

También hay estudios que sugieren que la curcumina puede ayudar a mantener la salud de los vasos sanguíneos y promover un mejor flujo de la sangre por el cuerpo.

No cabe duda que esta bebida es muy beneficiosa para la salud, pero hay que realizar un consumo responsable y no abusar de bebidas con exceso de teína.

El Economista