Desgaste físico y pérdidas financieras generan cortes eléctricos a comerciantes en San Francisco

Numerosos bajones y extensos cortes de luz han generado grandes problemas a los comerciantes en Maracaibo y San Francisco, sus ventas, productos y maquinas se ven afectadas por la inestabilidad en el sistema eléctrico en la región, en la que se aplican “religiosamente” al menos racionamientos de cuatro horas.

El pasado 22 de junio en una rueda de prensa gobernador, Omar Prieto, aseguró que los cortes de electricidad serian de cuatro a seis horas «dependiendo del consumo», y a pesar de que esa promesa “se ha cumplido” el detalle es que es impredecible el horario de suspensión del servicio eléctrico, lo cual ha dado lugar a que muchos comerciantes se vean en la necesidad de cerrar sus locales aún en horas laborales generando así grandes pérdidas.

Algunos se han atrevido a levantar sus voces ante la situación que califican como “insoportable e intolerante” porque una gran mayoría de estos comerciantes afectados dependen económicamente de sus negocio.

«Los cortes de electricidad me afectan frecuentemente ya que están en riesgo los equipos con los que trabajo y llega hasta el punto de dañarse la charcutería que vendo por falta de refrigeración».

Así lo afirmó Iris de Ocando, una comerciante de 46 años en el sector el Caujaro. Aseguró que sus ventas han disminuido considerablemente en los últimos meses, » también nos hemos visto afectados en las ventas, porque si no hay luz tampoco hay internet y muy poca señal telefónica, se hace imposible utilizar los puntos de ventas y la gente no puede comprar por la poca afluencia de efectivo «.

Ante tal escenario algunos comercios optaron por cerrar indefinidamente, sus productos requerían de refrigeración constante y desafortunadamente, su horario de corte eléctrico es en tiempo de flexibilización llevó a tener mercancía estancada y no poder venderla toda, causando frustración y grandes pérdidas en medio de esta pandemia donde todo parece estar cuesta arriba.

Dificultad para emprender

Por otro lado Albert Montiel, dueño de un comercio de alimentos, lácteos y charcutería, explicó lo fuerte que ha sido para su negocio el problema de la electricidad.

«Nos hemos visto afectados por los problemas eléctricos en varios ámbitos, en primer lugar los racionamientos que generan incomodidad laboral, las altas temperaturas restringe el buen funcionamiento de nuestros equipos; también se generan dificultades de comunicación ya que se va la señal telefónica y los puntos de ventas no pueden ser utilizados, lo que nos lleva a prender plantas eléctricas que generan mayores gastos.

Las plantas eléctricas se han convertido en el “salvavidas” de muchos locales pero con el punto en contra de la falta de señal.

“En el año 2019 y lo que va del 2020 se me han dañado varios aparatos eléctricos: el aire central, una cava exhibidora y una cava charcutera; porque aunque tenemos protectores ellos también se han dañado por la alta intensidad de la electricidad cuando llega, por lo que me he visto en la necesidad de invertir 400 dólares en equipos de protección”, expresó Montiel.

Afirma que la problemática en el sistema eléctrico venezolano no sólo se trata de gastos extras o cerrar temprano para los que tienen su negocio, sino también para aquellos que trabajan desde casa y tiene que regirse por el horario de corte y en otros casos más extremos, trabajar sin haber descansado después de una noche sin luz.

No hay duda que ha sido difícil para el venezolano emprender, pero a pesar de todo aún hay personas que confían en el país y buscan la forma de salir adelante con creatividad, con la esperanza de un mañana mejor que pueda llevarlos a una libertad financiera.

Silena Troconiz