Internacionales

¿Quién es Joe Biden? El presidente electo de los EEUU

Días antes de salir de la Casa Blanca en 2017, el presidente Barack Obama sorprendió a Joe Biden con la Medalla Presidencial de la Libertad (Medal of Freedom), declarando a su compañero de fórmula como “el mejor vicepresidente que ha tenido Estados Unidos”, un “león de la historia estadounidense”.

El tributo marcó el presunto final de una larga vida pública que puso a Biden en la órbita de la Oficina Oval durante 45 años; sin embargo, a través de una combinación de tragedia familiar y personal y algunos pasos en falso, no le habían permitido sentarse detrás del escritorio presidencial.

Pero ese día en que Obama lo homenajeó no era su final. Era apenas el comienzo.

Recibe las noticias directo en tu Whatsapp.
UNIRME A CANAL DE WHATASPP

El Canal del WhatsApp es más seguro, ya que otros usuarios no ven tu número telefónico

Joseph Robinette Biden Jr, de 77 años, fue elegido el sábado como el 46th presidente de Estados Unidos, tras derrotar al presidente Donald Trump en una elección que se desarrolló en el contexto de una pandemia, sus consecuencias económicas y un movimiento nacional en contra de la injusticia racial.

Se convierte en el presidente electo de mayor edad (el 20 de noviembre cumplirá 78) y trae consigo a una vicepresidenta electa histórica en Kamala Harris, la primera mujer de raza negra y persona de ascendencia del sur de Asia en servir en el segundo cargo más alto de la nación.

Su cuarto intento
Biden había aspirado al puesto durante más de tres décadas, dos veces sin éxito y pasando una tercera apuesta para intentar suceder a Obama hace cuatro años.

Biden esta vez sí fue el favorito que no logró ser en 1987, cuando su primera candidatura a la Casa Blanca terminó vergonzosamente con un discurso plagiado; o en 2008, cuando Obama y otros lo derrotaron en los caucus de Iowa; o incluso en 2016, cuando la combinación de la muerte de su hijo Beau en 2015 y el apoyo entre bastidores de Obama a Hillary Clinton lo obligaron a abandonar la carrera presidencial como precandidato.

Este año las cosas fueron diferentes. Era el candidato demócrata más moderado y experimentado pero eso también le valió críticas por ser demasiado viejo, demasiado moderado, demasiado blanco, demasiado melancólico, demasiado senatorial. No era la misma figura que había ido por primera vez a Iowa en el ciclo de 1988 como una estrella joven de su partido, un orador talentoso cuyos discursos en auge podrían llenar una sala. La velocidad de sus palabras se redujo y sus declaraciones presentaron algunos datos equivocados.

Aunque eventualmente elaboró una agenda política para una presidencia ambiciosa, no hubo una propuesta distintiva para un gran programa como “Medicare para todos”.

Su carácter

Biden enfatizó rasgos más personales. Su empatía, que se remonta a un tartamudeo debilitante de la infancia, un accidente automovilístico en 1972 que mató a su primera esposa y su hija pequeña semanas después de su elección al Senado, y luego la muerte de su hijo Beau como adulto, generaron empatía entre el público pero también dudas sobre su estabilidad mental.

En sus años en el Capitolio luchó por poner fin a la venta indiscriminada de armas y por la protección a mujeres golpeadas, entre otros asuntos de interés nacional.

Su victoria fue impulsada por los votantes de raza negra, al ganar las primarias de South Carolina y reiniciar la carrera a su favor como el favorito entre 12 precandidatos demácratas. Esa victoria envió un mensaje a los votantes demócratas en estados clave de que Biden podría construir una coalición ganadora.

Cuando Obama le otorgó ese raro honor civil a Biden en 2017 tenía razón en algo: “No está ni cerca de terminar su trabajo”.

Mira nuestras noticias en Instagram.
SIGUENOS EN INSTAGRAM


Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba