Los homicidas de Gael siguen libres: Su tío y chofer del “por puesto” relata su asesinato

Ya suman 17 días desde que el pasado sábado 10 de febrero, el Zulia se conmocionó con el vil asesinato de Gael Ponce, un pequeño de apenas un año, a quien un grupo de delincuentes le arrebató la vida en la carretera Troncal del Caribe. El chofer de aquel vehículo era su tío, quien relató todo lo ocurrido en aquella fatídica tarde.
El infante y su madre, Gusmary Beltrán, regresaban de visitar al padre del niño en Maicao, con rumbo hacia Los Haticos, en Maracaibo.
El equipo de Versión Final pudo conversar con su tío, y conductor del transporte, Danilo Alberto González, quien labora desde hace más de 25 años en la vía, y se encontraba trabajando la mañana del miércoles 14 de febrero, día que los transportistas organizaron una protesta por la inseguridad en la Troncal del Caribe tras el homicidio del pequeño Gael.
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González sigue utilizando el automóvil con el que conducía la tarde del asesinato del bebé, en cuyos asientos traseros aún yacen pedazos de vidrios rotos del impacto de bala que le quitó la vida a su sobrino.
“Eso fue después de El Rabito, en Macucutao, cerca de Moina, como a media hora de Maicao”, indicó el chofer.
El objetivo original no era el carro donde se encontraba Gael y su madre. Los delincuentes pretendían asaltar el vehículo que transitaba frente a ellos alrededor de la 1:00 de la tarde, y al momento de realizar el disparo, la bala alcanzó al sobrino de González en el asiento trasero.
“Nunca vi que nos había impactado, y cuando me bajé ella me grita y me dice: ‘Tío me hirieron al bebé’”, recuerda el transportista.
Al percatarse de la situación, emprendieron rumbo rápidamente a Paraguaipoa, pero en el hospital de la localidad “no había nada para atenderlo”.
“Entonces tenía unas tías ahí, como ellos son de Paraguaipoa, que dijeron para llevarlo lo más rápido posible para Maicao, porque ellos tienen el seguro colombiano”, señaló González.
El trayecto hacia Maicao fue más veloz de lo habitual, ya que los funcionarios permitieron paso libre en las alcabalas de seguridad al automóvil donde yacía el joven herido.
“Llegamos a Maicao, salté todos los huecos, los funcionarios me abrieron todas las alcabalas, pero a la media hora de llegar me dieron la noticia de que había fallecido”, recordó con tristeza el tío del infante.
Junto a Gael y su madre viajaban dos pasajeros más, un hombre en el asiento delantero, y otro junto a Beltrán, los cuales no sufrieron heridas graves.
González recuerda con profundo dolor el momento donde vio a su sobrino con la boca ensangrentada, al bajarse del vehículo para inspeccionar lo que había ocurrido.
“Eso fue cuestión de segundos, fue la primera vez que vivo algo así”, señaló el conductor.
En medio de las protestas del gremio de transportistas por la muerte de Ponce, González exigió a las que “arreglen la vía, ahí roban a cada rato porque hay muchos huecos, y que pongan un punto de control”.
Gael era el único hijo de Gusmary Beltrán, y fue enterrado este lunes en el cementerio familiar paterno en Guarero, Santa María, municipio Guajira.
Versión Final